Imagina un mundo donde te despiertas cada mañana sintiéndote renovado, con la mente despejada y listo para afrontar el día. Suena fantástico, ¿verdad? Desafortunadamente, casi 70 millones de estadounidenses viven en la oscuridad de la falta de sueño, lo cual afecta profundamente nuestra salud mental, nuestras relaciones, nuestro bienestar físico y nuestra productividad. 

Sin un descanso adecuado, nuestro cuerpo y mente tienen dificultades para funcionar al máximo. ¡Pero hay esperanza! Con algunos cambios en tu rutina, puedes mejorar significativamente la calidad de tu sueño. Aquí tienes tres estrategias sencillas para dormir mejor y tener una mente más sana. 

1. Haga ejercicio para tener noches de descanso reparador 

No necesitas correr un maratón para dormir mejor. Incluso una caminata corta durante el día puede marcar la diferencia. La actividad física estimula las hormonas naturales del sueño, ayudándote a conciliar el sueño más rápido y a disfrutar de un descanso más profundo. Ya sea una caminata rápida por la mañana, una sesión de yoga o simplemente bailar en tu sala, encuentra lo que te motiva e incorpóralo a tu rutina. 

2. Establezca una rutina relajante para la hora de dormir 

Nuestros cerebros son como computadoras, constantemente llenos de información y estímulos. Para ayudar a tu mente a relajarse, establece una rutina relajante para la hora de dormir. Considera actividades como escribir un diario o leer, que pueden disipar las preocupaciones del día. Estos rituales le indican a tu cerebro que es hora de relajarse, allanando el camino para una noche de descanso. 

3. Desconéctate guardando el teléfono 

Vivimos en un mundo digital, pero mirar una pantalla brillante justo antes de dormir es una de las peores cosas que puedes hacer para dormir. La luz azul que emiten los teléfonos y tabletas altera nuestro ciclo natural de sueño, lo que dificulta conciliar el sueño. Intenta establecer un límite de tiempo digital una hora antes de acostarte. Aprovecha este tiempo para conectar contigo mismo, reflexionar sobre el día o simplemente disfrutar de la tranquilidad. 

Si buscas una mejor salud mental, empieza por dormir. Al priorizar estos cambios sencillos pero efectivos, podrás recuperar tus noches y, con ello, tus días.