¿Has oído hablar de los daños punitivos? Probablemente no. ¿Y de los compensatorios? Probablemente no. No te preocupes. Te ayudamos. Aquí tienes un breve resumen de los diferentes tipos de daños en una demanda.
¿Qué son los “daños”?
Cuando alguien presenta una demanda civil, casi siempre busca algún tipo de compensación por lo que afirma que fue una mala acción de otra persona. Daños y perjuicios son la suma de dinero entregada a una persona o entidad como compensación por una pérdida causada por otra persona.
Por ejemplo, en muchos de nuestros casos, nuestros clientes resultaron heridos en un accidente que no fue su culpa. La indemnización que suelen recibir cubre gastos médicos, la sustitución del vehículo y cualquier tratamiento futuro que necesiten debido a sus lesiones.
En los procesos civiles, los daños a menudo se dividen en dos categorías: compensatorios y punitivos.
Daños compensatorios
La indemnización por daños compensatorios tiene como objetivo equiparar la situación financiera de la parte lesionada con la que habría tenido de no haberse producido la lesión. Puede tratarse de daños económicos o no económicos.
Los daños económicos buscan compensar pérdidas financieras, como facturas médicas o daños a la propiedad. Supongamos que alguien pierde el control de su camioneta, choca contra la casa de otra familia y destruye su sala. La indemnización económica compensatoria correspondería a los costos de reparar esa casa y dejarla en las mismas condiciones en que se encontraba antes del accidente.
Los daños no económicos, por otro lado, compensan a las personas por las consecuencias intangibles de una lesión, como la angustia emocional o, en el peor de los casos, la pérdida de un ser querido. Imagine que alguien estuviera sentado en el sofá viendo la televisión cuando un camión se estrellara contra la sala. El trauma que sufriría una familia tras la pérdida de un ser querido superaría con creces cualquier pérdida tangible, como las reparaciones del edificio o la sustitución de muebles.
Daños punitivos
Los daños punitivos están diseñados para castigar al infractor, no para compensar a la víctima. Esto solo ocurre en casos en que el acusado ha actuado con negligencia grave, fraude o malicia.
Siguiendo con el mismo ejemplo, un jurado podría considerar la posibilidad de conceder daños punitivos tras descubrir que el conductor del camión ya había sido arrestado dos veces por conducir ebrio, pero su empresa le permitió seguir como repartidor de todos modos. Ese jurado podría decidir que la empresa actuó con tanta imprudencia al permitir que un conductor ebrio comprobado se pusiera al volante que merece ser castigado.
Dado que no tienen por objeto compensar a la parte lesionada, los daños punitivos sólo pueden concederse después de los daños compensatorios.
Existen límites en la cantidad de daños compensatorios y punitivos que una persona puede recibir en Texas. Si sufrió una lesión que no fue su culpa, es importante hablar con un abogado calificado para asegurarse de obtener el valor total de su caso.