A partir del 1 de septiembrecalleEn 2017, enviar mensajes de texto al volante en el estado de Texas se convirtió en una infracción de tránsito. Si se le sorprende enviando mensajes de texto al volante, la multa será de $25 a 99 si es la primera vez que lo incurre, y de $110 a $200 si es reincidente. Si un accidente causado por enviar mensajes de texto al volante resulta en la muerte o lesiones corporales graves a otra persona, se le puede imputar un delito menor de Clase A, punible con una multa que no exceda los $4,000 y confinamiento por un período no mayor a un año.
Esta ley sólo se aplica específicamente a “leer, escribir o enviar mensajes electrónicos” a través de un “dispositivo de comunicación inalámbrico”. En la mayoría de las ciudades, todavía es legal que los automovilistas utilicen sus teléfonos para navegación GPS, aplicaciones de música, marcar números de teléfono, etc. El proyecto de ley prohíbe que un oficial tome un teléfono si el conductor comete una infracción y no asigna puntos a la licencia de conducir.
La ley permite a los gobiernos locales aprobar prohibiciones más estrictas de teléfonos celulares, como la prohibición del manos libres, pero invalida todas las demás leyes sobre el envío de mensajes de texto y la conducción. Si bien no prohíbe el uso de dispositivos portátiles en todas las zonas escolares, sí prohíbe su uso.
Asegúrese de que su ciudad no tenga una prohibición más estricta que la aprobada por la legislatura. Más de 45 ciudades de Texas han aprobado leyes estrictas de manos libres a nivel local, y la Legislatura de Texas no invalida estas prohibiciones para medidas que van más allá de los mensajes de texto.
Según TxDot, 1 de cada 5 accidentes en Texas se debe a la conducción distraída. En 2016, se registraron 109,568 accidentes de tránsito en Texas relacionados con la conducción distraída, un 3% más que en 2015. Más de 3,000 personas resultaron gravemente heridas y 455 fallecieron. Estos accidentes fueron más frecuentes entre conductores noveles y jóvenes, de entre 16 y 34 años.
Daniel Stark representa diariamente a personas que resultaron lesionadas como resultado de la negligencia de conductores distraídos, y aplaudimos a la Legislatura de Texas por tomar esta importante medida para abordar el problema. Esperamos que este sea un primer paso para reducir el grave problema de la conducción distraída en el estado de Texas.