Conozca a Chris Carver, abogado litigante y socio de Daniel Stark. Con amplia experiencia en casos de lesiones catastróficas, Chris defiende incansablemente a nuestros clientes.

Criado en Lubbock, Texas, la pasión de Chris por el debate fue evidente desde pequeño. Como miembro del equipo de debate de su preparatoria, reconocido a nivel estatal, perfeccionó sus habilidades de oratoria y desarrolló la capacidad de elaborar argumentos persuasivos.

Durante la preparatoria, Chris se cruzó con Jonathan Stark, el futuro cofundador de Daniel Stark, quien por casualidad formaba parte del equipo de debate de una preparatoria rival. No imaginaban que su encuentro sentaría las bases de una trayectoria profesional extraordinaria.

Tras graduarse de la preparatoria, Chris cursó su licenciatura en la Universidad Tecnológica de Texas en Lubbock. Mientras estudiaba ciencias políticas, Chris desarrolló una pasión por la filosofía. Intrigado por el razonamiento y la argumentación, Chris se matriculó en varias clases de filosofía que desarrollaron aún más su capacidad de razonamiento analítico.

Chris descubrió más tarde que sus clases de filosofía lo prepararon de forma excepcional para las complejidades del derecho. «Elaborar argumentos sólidos, analizar situaciones complejas y pensar críticamente se convirtió en algo natural para mí», dijo Chris.

Aunque inicialmente planeaba ser profesor de ciencias políticas, Chris recibió una oferta inesperada durante su proceso de solicitud de posgrado. El director del departamento de comunicaciones de Texas Tech le ofreció una beca completa para estudiar y enseñar oratoria y comunicación profesional en Texas Tech. Chris aceptó la oferta y pudo completar su maestría en un año.

Como profesor de oratoria y entrenador de debates en la Universidad Tecnológica de Texas, Chris se cruzó de nuevo con Jonathan Stark. Esta vez, lo entrenó en debates durante su semestre universitario en Texas Tech.

Sin embargo, tras obtener su maestría, Chris se dio cuenta de que sus habilidades e intereses eran más adecuados para una carrera en derecho que para el mundo académico. Por ello, asistió a la Universidad de Texas (UT) para estudiar derecho.

En UT, Chris se destacó en Derecho Constitucional bajo la guía del reconocido profesor Charles Allen Wright, quien se desempeñó como asesor personal del presidente Nixon y fue autor de un tratado ampliamente reconocido en la práctica federal.

Participar en concursos de juicios simulados en la UT también fue fundamental en la formación jurídica de Chris. Fue durante estos concursos que forjó una fructífera colaboración con su compañero de clase Cory Smith, quien ahora es su colega en Daniel Stark.

Juntos, Chris y Cory lograron un éxito notable en juicios simulados durante su segundo y tercer año de derecho. Su dinámica dupla resultó ser una fórmula ganadora, y demostraron un talento y unas habilidades excepcionales en el tribunal.

Entre sus logros se incluyen ganar el Torneo Supremo de Juicios Simulados para Personas Mayores y representar a la UT en el equipo nacional de juicios simulados. El destacado desempeño de Chris y Cory también les valió la incorporación a la prestigiosa Orden de Abogados, un honor otorgado a los 10 mejores litigantes de una facultad de derecho estadounidense.

Mientras estudiaba derecho, Chris trabajó como asistente legal para un abogado demandante, adquiriendo experiencia en derecho penal, familiar y civil. Sin embargo, Chris a menudo se sentía frustrado por la reticencia del bufete a ir a juicio. Llegaban a acuerdos por cantidades que, según él, subestimaban su verdadero valor, ya que no estaban dispuestos a llevar los casos a los tribunales. Esta experiencia impulsó en Chris el deseo de trabajar con alguien que reclamara el valor total de las pérdidas de sus clientes mediante litigios.

Afortunadamente, al graduarse de la facultad de derecho, el sueño de Chris se hizo realidad. Regresó a su ciudad natal, Lubbock, y consiguió un puesto como abogado asociado en un bufete local conocido por su gran carga de trabajo en juicios. En sus dos primeros años como abogado, Chris tuvo la oportunidad de llevar un total de once casos, incluyendo un caso complejo con diecisiete demandantes en un tribunal federal.

Estas primeras experiencias como litigante le permitieron a Chris adquirir una valiosa experiencia en los tribunales. «Fue un proceso de aprendizaje muy largo, pero la mejor manera de aprender es con la práctica», dijo Chris.

Como parte de sus responsabilidades en el bufete, Chris contrató asistentes legales para ayudarle a gestionar la carga de trabajo. Fue durante este período que contrató a Jonathan, quien estaba a mitad de sus estudios de derecho en Texas Tech. La dedicación y las habilidades de Jonathan lo llevaron a trabajar como asistente legal en el bufete de Chris durante un año.

Una vez que Jonathan se graduó y siguió adelante, Chris se concentró en ejercer la abogacía de lesiones personales en Lubbock durante las siguientes dos décadas.

Entonces surgió una oportunidad emocionante. Tras años de contacto, Jonathan sugirió que Chris se uniera a él en su firma, Daniel Stark. Los años de camaradería profesional y las experiencias compartidas con Jonathan lo llevaron a aprovechar la oportunidad.

En 2014, Chris tomó la crucial decisión de unirse a Daniel Stark, lo que lo impulsó a él y a su familia a mudarse de Lubbock a Bryan, Texas. Desde su incorporación al equipo, se le ha confiado la gestión de algunos de los casos más complejos y de mayor valor de nuestra firma, y en septiembre de 2024, Chris fue uno de los seis abogados en ser ascendidos a socio.

Según Chris, unirse a Daniel Stark fue la mejor decisión que tomó.

“Cuando me uní, teníamos seis o siete abogados. Ahora, Daniel Stark tiene 40 abogados”, explicó Chris. “A medida que Daniel Stark crecía, también lo hacía la complejidad y la magnitud de nuestros casos. Esto me ayudó a seguir evolucionando y desarrollando mis habilidades legales”.

Chris es una figura poderosa cuando se trata de defender a sus clientes. Su experiencia en derecho de lesiones personales y su liderazgo innato lo convierten en un guía fundamental para nuestro equipo. Entre sus muchos logros, el veredicto de $41 millones en Currie v Landry, et al. destaca como testimonio de su destreza legal. Este caso emblemático le valió el reconocimiento de... Veredicto máximo como uno de los 20 mejores veredictos en Texas para 2023, consolidando su reputación como un formidable defensor de la justicia.

Estamos sumamente agradecidos por el papel de Chris en la formación de Daniel Stark. Con él, sabemos que nuestros clientes están en buenas manos.